En la editorial de Pamela Cerdeira en De Pisa y Corre el tema de hoy es el derrumbe de un tramo elevado del metro de la CDMX y el debate chilango. Acompaña a Pamela Cerdeira de lunes a viernes en DPC por Imagen Televisión a las 8 am junto a Hiram Hurtado.
Derrumbe de un tramo elevado del metro
Ayer a lo largo de este programa fueron testigos de uno de los momentos que nos dibuja como especie. Que explica cómo nos traviesan los momentos más dolorosos, cómo reaccionamos de formas extrañas. Fue, una sutileza. Un enlace desde la Semefo. Mientras leíamos y escuchábamos de reportes de personas que aun no habían sido localizadas, a lo largo de ese pequeño fragmento de mañana, nadie se había parado para buscar a su familiar ahí.
¿Quién querría? ¿Quién quisiera si quiera considerar la opción de que ese uno de los lugares en el que podría encontrar a su ser querido?
Preferiríamos, cualquiera, visitar 5 veces todos los hospitales, antes de siquiera considerar esa última opción, la definitiva. En la única en la que no quisiéramos encontrarles. Ese momento televisivo, por unos cuantos segundos, habló con sus ausencias, sobre el dolor que nos define. Y que antier marcó otro capítulo trágico en la ciudad. Mientras tanto ¿Qué hacían quienes tenían que reaccionar?
Reacción sobre el derrumbe de tramo elevado del metro de la CDMX:
La victimización como forma de gobierno. Ya chole.
— Alejandro Rosas (@arr1910) May 4, 2021
Día Mundial de la Libertad de Prensa
Ese comentario, se dio en la misma semana en que el Día Mundial de la Libertad de Prensa, en uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo. La negligencia de un periodista nunca ha cobrado tantas vidas como la de un funcionario público. La negligencia de un periodista le costaría su trabajo y su capital para conseguir uno nuevo, su prestigio. En un funcionario o varios, les consigue mejores puestos, mayor protección. Hasta hoy 5 de mayo, nadie a sido cesado o cesada por las vidas cobradas por ese incidente. Y no se trata de correr a funcionarios medios para calmar la sed de justicia de la gente de la ciudad de México, se trata de que hacer responsables a quienes llevan las riendas, porque si no les pasa nada, nos seguirá pasando todo.
Debate Chilango
Ayer por la noche tuve la oportunidad de moderar uno de los debates chilangos. Es decir, como en todo el país se celebrarán elecciones en todos lados con sus particularidades en cada entidad. Aquí elegiremos al legislativo y a las y los titulares de las alcaldías.
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Yo peco de idealista, creo que es a través de la política, entre otras cosas, que podemos cambiar al país. Creo que para tener mejores representantes, tenemos que ser mejores ciudadanos. Informarnos, saber quiénes son, qué proponen, darles nuestro voto y ya en el poder exigir que cumplan con lo que prometieron. Los debates son la mejor forma para enterarnos de esa información rica y pura que vale la pena escuchar. Bueno, si es que así sucede. Vamos de lo chusco a lo trágico. A Patricio y a mi nos tocó moderar el debate a la alcaldía Miguel Hidalgo. Había 9 candidatas y candidatos para esta alcaldía. Llegaron 8, 5 presenciales, 3 en línea.
¡Le estaban soplando la respuesta! El tema no terminó ahí. Menos una candidata, menos dos, menos 3.
Todo, menos propuestas
Y por supuesto, el eterno ausente el candidato que está buscando la reelección. Porque argumentó se unía al luto oficial suspendiendo sus actos de campaña. Increíble, pues hasta en la ausencia terminó por convertirla en un acto de campaña. Quien tendría que ser, porque busca una relección, la primera persona obligada a rendir cuentas a las y los electores y a explicar por qué quiere pedir su voto otra vez. Pero este es sólo el ejemplo de uno de los tantos debates que suceden en estos días en casi todo el país. Éstas, las elecciones más grandes nuestra historia, las que tienen deportistas, luchadores, cantantes, reinas de belleza, estrellas porno, tienen TODO menos propuestas. Buscan nuestro voto sin medio proyecto de lo que quieren construir con él. No son todos, pero sí la mayoría.
Tendríamos que estar furiosos, enojados porque sus caprichos, su falta de preparación de proyectos son tarde o temprano nuestras tragedias.
Por cierto, Tláhuac no sólo es la alcaldía escenario de las más reciente tragedia. Tláhuac es escenario de muchas otras tragedias, la pobreza, la delincuencia, el crimen organizado, el olvido y el resultado de uno tras otro que pasan por el escenario de rogar por el voto, sin tener tantito, tantito interés en mejorar la situación de las personas.
